Las falleras también lloran

He aquí, Lucía Gil, la fallera mayor de este año:



Después de mi periplo valenciano, mi mayor intriga es saber por qué lloran las falleras mayores. ¿Se acaba su reinado?¿Se les quema el ninot después de un año de dalequetepego?¿Es porque provocan incendios? A riesgo de parecer insensible, no lo comprendo.

Es que hay personas que son muy falleras, llevan ese sentimiento ahí dentro del pecho, como quien lleva un moño, una dilatación o una falda sin calzoncillos debajo. La verdad es que es bonito verlas llorar mientras arde el fuego, con ese traje (¿qué llevan debajo de la falda?) y ese peinado que inspiró el de la princesa Leia... esto es cultura general. ¿O no?



La cuestión es que cada persona vive de acuerdo a su cultura y sus tradiciones. Por ejemplo, ¿es normal que cada San Juan la gente se ponga a saltar por encima de una hoguera borracha? A mí me lo parece porque estoy acostumbrada, pero quien no haya visto eso nunca... se sorprendería.

A mí me encantaría poder ser fallera para quemar cosas y que la gente me de besos y me aplauda y me admire. Parece ser que te gastas una pasta (la fama cuesta) y que la cosa no es fácil si quieres ser la más mayor de toda Valencia: que si te educan desde infante, te enseñan protocolo, das cenitas en tu casa, conoces a las personalidades más irrelevantes... un derroche de posición social y dinerito que todavía no puedo permitirme. Pero puedo trepar... Anda que no estaría yo guapa con las ensaimadas (a.k.a. rascamoños) y las peinetas de latón chapado en oro :D

Por eso puedo llegara entender por qué lloran. Es bonito.

Ladytron - Sugar

Qué buen invento . Sirve para subir vídeos propios y ver los que otra gente ha subido.

Estando en modo fan me he puesto a buscar Sugar, el último vídeo de Ladytron. Yo le encuentro un punto bollo muy importante...

Oigo campanas y no sé dónde :D

¿No existirán otros tipos de amor?

Que llegue la primavera de una vez, que se vaya esa humedad de mi habitación, que mis huesos dejen de sentirse resentidos de jóvenes que son y que no predigan la lluvia con sus achaques. Te lo digo, mañana llueve. Que vuelvan los días en que el calor huele, cuando te despiertas con la luz entrando por entre las rendijas de la persiana porque, ¡qué suerte!, ya está amaneciendo. No hace falta que vaya a tientas por lo oscuro, por lo menos durante unos meses. Quiero poder ir por la calle y dejar de mirar al suelo (y respirar profundo, llenar los pulmones de pensamientos ñoños porque aquí te espero)

No me han enseñado a sufrir por amor. Desde pequeña he aprendido a querer sin esperar nada a cambio. Nunca me han pegado ni me han tratado mal. No lloro, pero siento las cosas profunda y profusamente. Todos tenemos en nuestro inconsciente, grabado a fuego, el ideal romántico del amor decimonónico al puro estilo de "Madame Bovary" o "Cumbres Borrascosas": "ni contigo ni sin ti, sin ti me muero". ¿Es eso el amor verdadero, el que hay que esperar?¿No existirán otros tipos de amor?

No espero a alguien que sea perfecto. No espero que me quieran hasta la exageración ni que me adoren. No hace falta que me recuerden a diario todas las cosas buenas que soy ni lo felices que se sienten por estar a mi lado. Tal y como yo lo veo, tengo que encontrar un concepto de amor para mí porque no me identifico con el que conozco. ¿Será que a lo mejor no sé querer a nadie?¿Será quizá que todavía no me he atrevido a querer a nadie?¿Y por dónde empiezo?

Creo que es diferente estar enamorado que amar, no sé explicarlo: sólo sé que es distinto. Me he enamorado, pero nunca he amado a nadie. Es por eso que todas las palabras para ti son vagas, son imitaciones de un sentimiento que desconozco, son todas aquellas cosas que me gustaría escuchar a mí también... aún no he aprendido cómo se hace, aunque a ti te parezca de lo más triste, ya lo sé. Pero creo que no tengo la culpa de no estar preparada.

Sólo se que el verdadero amor es aquel que te deja ser libre.

Qué asco de país

Ayer leí en El País un artículo (http://www.elpais.es/articulo/elpedupor/20060306elpepiedu_7/Tes/El) en el que analizaba si realmente los informes PISA sobre la situación de la educación en las comunidades autónomas e incluso en los diferentes países de la Unión Europea, aportaban o aclaraban algo. Respuesta: NO. Da igual cuánto inviertan por alumno, los métodos educativos, que sea Valencia o Alemania, que les quemen los coche a los profesores, que vaya Bárbara Rey a hacer una performance sobre los ríos cuando se secan... No existe un modelo perfecto con unas bases concretas que aseguren el éxito educativo: sólo se reconoce como exitoso el caso de Finlandia. Y no se sabe por qué.

Qué bien. Ya me quedo más tranquila.